Según el estudio Riesgos e incertidumbre de futuro de la economía española, editado por el Consejo General de Economistas
Los principales riesgos para la economía española en 2018 son cinco: tensiones geopolíticas, ruptura del proyecto europeo, sorpresas en mercados financieros, retardo innovador y temas territoriales
Madrid, 15 de diciembre de 2017.- El Consejo General de Economistas ha presentado hoy el estudio titulado Riesgos e incertidumbres de futuro de la economía española, editado por dicho Consejo General y en el que sus autores han identificado y analizado cinco riesgos de referencia que podrán tener una mayor repercusión en la economía española. Tres son de carácter global, aunque con rasgos especiales para nuestro caso (tensiones geopolíticas, ruptura del proyecto europeo y sorpresas en mercados financieros), y dos más específicos de nuestra economía (retardo innovador y temas territoriales).
Como se indica en el estudio, la economía española vive una coyuntura de elevado crecimiento y creación de empleo, destacando como una de las más dinámicas de la Eurozona, pero no tiene garantizado mantener esta privilegiada situación a futuro. Según el Consejo General de Economistas, la elevada tasa de crecimiento experimentada últimamente por la economía española no puede hacernos perder de vista los riesgos que nos amenazan y los retos a los que nos enfrentamos.
Es por ello que ha estimado conveniente contribuir a la reflexión sobre esta cuestión mediante la publicación de este estudio que ha sido elaborado por dos economistas expertos: Antonio Pulido San Román –catedrático emérito de Econometría de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y director del Centro de Predicción Económica (CEPREDE)– y Julián Pérez García –director del Departamento de Economía Aplicada de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UAM.
Como ha señalado durante la presentación Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas de España, “por el lado del consumo, la percepción de riesgos se asocia a un aumento en el ahorro precautorio y a un retraso en las decisiones de compra de bienes duraderos. Por lo que se refiere a la inversión, la evidencia muestra que tienden a posponerse nuevos proyectos en tanto no se despeja la incertidumbre, lo que conduce a contracciones en la formación bruta de capital. En el plano financiero, la incertidumbre se relaciona con un aumento de los tipos de interés, con el racionamiento del crédito y con caídas en los índices de bolsa”.
PRINCIPALES RIESGOS PARA LA ECONOMÍA ESPAÑOLA EN 2018
1.- Tensiones geopolíticas:
- Entre los riesgos destacados a escala mundial, hay que prestar especial atención a tensiones geopolíticas y terrorismo yihadista. Para España los riesgos-país no se centran solo en las grandes economías mundiales como EE.UU. o China, sino que se localizan muy especialmente en Latinoamérica y UE.
- Se puede establecer una jerarquía de países del mundo (de entre 186) a prestar una especial atención por su incidencia en la economía española: De más a menos importante, serían Francia, Brasil, Reino Unido, Italia, México, Alemania, Portugal, EE UU, Rusia y Venezuela.
2.- Rupturas en el proyecto europeo:
- Cualquier elemento de riesgo vinculado con el conjunto de la economía europea se convierte, de forma automática, en un elemento de riesgo específico para nuestra propia economía. Mientras que la economía de la Eurozona representa algo menos del 17% del PIB mundial, respecto a nuestra economía representa más del 43%.
- No parece que el abandono del proyecto europeo por Reino Unido vaya a inducir un proceso de salida en cascada de otras economías. El impacto para el propio Reino Unido se estima en el orden de un punto y medio de porcentaje de reducción de crecimiento del PIB a corto plazo, que podría duplicarse a más largo plazo.
- Presentamos una elevada interrelación directa con el Reino Unido que, en la actualidad, ocupa el cuarto puesto entre nuestros clientes internacionales, absorbiendo más del 7% de nuestras exportaciones totales de bienes; mientras que es nuestro quinto proveedor internacional al que adquirimos cerca del 5% de nuestras importaciones. Como resultado de estos flujos, desde hace unos años presentamos un superávit comercial superior a los 5.600 millones de € anuales. Adicionalmente, el Reino Unido es el primer emisor de los turistas que recibimos en nuestro país, representando cerca del 22% del total de turistas que nos visitan anualmente, mientras que el porcentaje de turismo español con destino al Reino Unido es ligeramente inferior, limitándose al 7% del total y ocupando la quinta posición en el ranking de destinos internacionales de los españoles. Esta situación de desequilibrio en los flujos turísticos genera, nuevamente, un importante superávit de la balanza bilateral que supera los 6.000 millones de €. De la misma forma, los saldos de otros servicios y de rentas son igualmente positivos para nuestro país, por lo que, globalmente, obtendríamos un saldo positivo cercano a los 15.000 millones de €, es decir, algo menos del 1,5% del PIB español. En términos de las inversiones directas cruzadas, el Reino Unido se presenta como el principal destino de nuestras inversiones, superando el 14% del stock acumulado de Inversión Extranjera Directa (IED) española en el exterior, mientras que algo más del 10% del stock de inversión extranjera en España procedería del Reino Unido. De acuerdo con los datos del INE, en España residen de forma permanente unos 300.000 ciudadanos británicos, frente a unos 200.000 españoles que se estima que pueden estar residiendo en el Reino Unido.
- La fuerte conexión de nuestro país con el Reino Unido nos indica que el cambio de las condiciones de interrelación con el conjunto de la UE en términos de movilidad de personas, mercancías, servicios y capitales, podría tener un efecto relevante sobre nuestra economía. Una estimación inicial apunta a un efecto sobre el crecimiento español de entre 0,2 y 0,9 puntos de porcentaje, según como se desarrolle el proceso de salida de la UE.
3.- Riesgos en mercados financieros:
- Los riesgos financieros son múltiples y especialmente relevantes en algunos países como EE UU, la UE o China. Cambios en las políticas monetarias muy expansivas, altos niveles de endeudamiento y rentabilidades históricamente excepcionales en algunos países y activos financieros avisan de la probabilidad de correcciones incluso bruscas. Por el momento no parece haber riesgo inmediato de burbuja financiera y no es bueno alimentar esos temas sin soportes muy fundados.
- Para España, entre los riesgos financieros, hay que valorar el impacto de la previsible vuelta a la normalidad de la política del BCE, con un escenario monetario más restrictivo, con disminución progresiva del programa de compra de deuda y una elevación de los tipos de interés, que hasta la fecha se han mantenido excepcionalmente bajos.
- Un escenario de crecimiento más rápido de los tipos de interés a largo plazo (del orden de 100 puntos básicos adicionales en promedio anual durante los próximos años), junto con una prolongación de restricciones crediticias, podrían restar entre 1 y 2 décimas de punto de crecimiento del PIB real según nuestro cálculos en 2018-19 y reducir entre 20 y 30 mil la generación de empleo, aparte de deteriorar el déficit público como resultado de la elevación de los costes de deuda.
4.- Riesgos de retardo innovador:
- De entre 120 países analizados en el Global Innovation Index, los más innovadores superan los 60 puntos. La mayoría de las economías desarrolladas o de los países emergentes líderes superan los 45 puntos. España se sitúa en el informe de 2017 en la posición 28 con una nota de 49 puntos.
- El índice Global Talent Competitiveness Index (GTCI) elaborado por el INSEAD, referido a 118 países sobre su capacidad para promover y atraer talento, refleja para el año 2017 una nota que se mueve en un intervalo de entre 75 puntos (Suiza) y 27 (Madagascar). Según sus cálculos, a España le corresponde una nota de 54 y un puesto 35. La calificación obtenida no sitúa a nuestro país en buen lugar. Entre los países europeos quedamos en el puesto 22.
- Un punto clave está en la reducción de la proporción de capital intangible de nuestro país, situación agravada por años de un esfuerzo inversor reducido como consecuencia de los efectos contractivos de la pasada crisis, especialmente causados en España y otras economías del sur de Europa.
- En Estados Unidos la inversión media en intangibles durante dos décadas (1995-2013) se acerca al 15% del VAB del sector empresas. El promedio UE-15 es del 10%. Solo España y Portugal se sitúan ligeramente por encima del 5% y Grecia en el 3%.
- En la misma línea, el Informe COTEC 2017 (elaborado por la Fundación COTEC para la innovación) pone de relieve la divergencia observada durante los últimos años entre la evolución del gasto total en I+D en España con respecto a la mayoría de los países europeos y así, mientras que el conjunto de países integrados en la Unión Europea habría más que recuperado ya el nivel de gasto total previo a la crisis, con unos niveles totales en 2016 un 26% por encima de los registrados en 2008, en España, aún seguiríamos manteniendo el pasado año 2016 un nivel de gasto un 9% inferior al ejecutado en 2008. En términos relativos al volumen total de PIB, nuestra brecha relativa con respecto a los niveles medios europeos se habría incrementado hasta el 0,8% del PIB en 2016; mientras que la distancia que nos separa de los líderes europeos (Suecia) se elevaría por encima del 2% del PIB.
- Acelerar la inversión en activos intangibles para acercarnos a los promedios de los países de la Eurozona supondría más que triplicar el ritmo actual, con impactos sensibles en crecimiento del PIB (dos o tres décimas de punto por año) y empleo (entre 40 y 50 mil nuevos puestos por año) según nuestras estimaciones.
5.- Riesgos por temas territoriales
- Especial relevancia tiene en España la incertidumbre asociada a los acontecimientos relacionados con las tensiones independentistas catalanas y el riesgo político y económico de una reordenación territorial pendiente.
- Se observa una súbita elevación de la incertidumbre por las tensiones en Cataluña. De octubre a septiembre de 2017, el indicador de incertidumbre sobre la economía española ha sufrido un incremento de más del 123% (ha pasado de 12 puntos, en septiembre, a 26,8 en octubre).
- Esta elevación de la incertidumbre, ya constatada en los últimos datos, es uno de los elementos que en mayor medida podría terminar generando efectos económicos adversos durante los próximos trimestres.
- El modelo de alta frecuencia utilizado por los autores del estudio para la revisión permanente del PIB (tanto de España como de Cataluña y otras regiones), adelanta una progresiva desaparición del diferencial de crecimiento catalán respecto a la media nacional durante los próximos meses.
- Los mercados financieros sí que parecen haber registrado un cierto efecto del desarrollo reciente del proceso soberanista, y así, tras el verano, se ha registrado un ligero aumento de la prima de riesgo, matizado en los datos más recientes, y una mayor contención en los mercados de valores españoles con respecto a la media europea.
- Cuantitativamente, las 3.000 empresas que trasladaron su sede social de Cataluña a otras regiones, entre el 2 de octubre y diciembre –según datos del Colegio de Registradores–, apenas supondrían el 0,7% del total de empresas catalanas con asalariados; si bien es cierto que varias de las empresas que han anunciado su traslado se sitúan entre de las de mayor facturación.
- Las estimaciones, necesariamente imprecisas, sobre el impacto en el crecimiento económico español apuntan hacia un entorno de reducción de medio a un punto para el conjunto del país en 2018, que podría duplicarse en el caso de que se mantenga la incertidumbre sobre la situación de Cataluña.
- Según nuestros propios cálculos, lo más probable, si se produce una recuperación progresiva de la confianza (reducción de la incertidumbre) a lo largo de 2018, es que el impacto sea del orden de medio punto de menor crecimiento del PIB para el conjunto de la economía española (algo menos de 100.000 puestos de trabajo), efectos que podrían duplicarse si se mantiene la incertidumbre.
- En el análisis de un caso de independencia efectiva de Cataluña habría que añadir múltiples aspectos sobre “dividendo fiscal”, “efecto frontera”, financiación internacional, asignación de activos y pasivos, etc.
Se adjunta: –Estudio Riesgos e incertidumbres de futuro de la economía española.
-Foto (de izda. a dcha.): Pascual Fernández, decano del Colegio de Economistas de Madrid, Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas, Antonio Pulido, catedrático emérito de Econometría de la Universidad Autónoma de Madrid y Julián Pérez, director Departamento Economía Aplicada Facultad CCEE y Empresariales UAM.