En los últimos tiempos nos hacemos esta pregunta cuando nos vencen los depósitos, los fondos o las letras del tesoro donde tenemos invertidos nuestros ahorros. En un entorno como el actual, en que los tipos de interés están extremadamente bajos, a los ahorradores les puede costar mucho obtener rentabilidad a sus ahorros. Aunque para un ahorrador/inversor, lo más importante es preservar el capital, a veces, el obtener una cierta rentabilidad al mismo lleva a menospreciar riesgos y cometer errores que pueden comprometer el patrimonio ahorrado.
Por ello es importante, antes de acometer cualquier inversión tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Planificación financiera: hay que analizar que parte del patrimonio se quiere invertir se va a necesitar a corto, medio o largo plazo y en base a ello seleccionar inversiones con vencimiento/liquidez acorde a estas necesidades.
- Información sobre los instrumentos ya sean financieros o de otro tipo en los que se vaya a invertir. Es fundamental conocer:
- La complejidad del producto
- Los riesgos que lleva asociado o lo que lo mismo, lo máximo que se puede llegar a perder
- La rentabilidad esperada y en qué circunstancias
- Los gastos que lleva asociados, no solo en el momento de la contratación sino durante todo el tiempo en el que permanece viva la inversión.
- Mercados en que se negocia
- En caso de cancelación anticipada, los costes de cancelación y la liquidez
- Información de la entidad financiera en la que materializar las inversiones
- La solvencia de la entidad
- Los conflictos de interés de la entidad en caso de que el producto esté vinculado a ésta (emitido o gestionado por una sociedad de grupo)
- Las comisiones y gastos
- La necesidad de contratar otros productos/servicios de la entidad para acometer la inversión
Así mismo a la hora de seleccionar el producto hay que tener en cuenta que:
- Rentabilidades pasadas no garantizan rentabilidades futuras
- La rentabilidad hay que medirla con la inflación
- Hay productos con una alta volatilidad que hacen que su valoración varie diariamente
- La cartera de inversión ha de estar diversificada para minimizar los riesgos
Dada la cantidad de instrumentos financieros existentes, y la capacidad de la industria de generar nuevos productos cada vez mas sofisticados que pueden ser comercializados al pequeño inversor/ahorrado y que en muchas ocasiones van acompañados de campañas publicitarias agresivas, es necesario que tomen las precauciones oportunas para no invertir en productos no adecuados al perfil de riesgo del inversor.
Al igual que cuando se trata una dolencia, se puede tomar un paracetamol sin prescripción médica, pero no otros medicamentos que se desconocen si son buenos para esa dolencia o tendrán efectos secundarios, a la hora de realizar inversiones la actitud ha de ser similar. Todo el mundo sabe lo que es un depósito (aunque también puede tener riesgos al igual que el paracetamol) pero para contratar otros instrumentos más complejos o con mas riesgo, es necesario contar con los conocimientos necesarios o, en su defecto, acudir a un especialista independiente, que recomiende cual es la inversión más idónea para el perfil de riesgo del inversor. El especialista, de forma independiente, será el encargado de informar y alertar de los riesgos de los productos y hacer que el cliente lo comprenda y en su caso lo asuma, antes de materializar la inversión.
El especialista por supuesto es una Empresa de Asesoramiento Financiero, (EAFI), inscrita en el Registro de Empresas de Asesoramiento Financiero de la CNMV, quien de forma objetiva e independiente y con los conocimientos y experiencia acreditados, puede hacer recomendaciones de inversión adecuadas e idóneas para el inversor.